además, encontré arañas en la habitación, algo que nunca debería suceder en un hotel de este calibre. casi escribo una buena crítica, pero me quedé con ganas de un trato VIP que nunca llegó.

Un hotel con encanto, pero ruidoso

Durante nuestra estadía, disfrutamos de la hermosa piscina y una cena en el restaurante Drac que nos dejó gratos recuerdos. Las vistas desde el hotel son impresionantes.

Sin embargo, nuestra habitación estaba al lado de unas escaleras metálicas que hacían ruido a toda hora, lo que afectó nuestra tranquilidad por las noches. La limpieza también podría mejorar.

Esto es lo que destaca de verdad

Un hotel que cautiva con su belleza y vistas espectaculares. Sin embargo, la atención al cliente tiene áreas que mejorar. hubo retrasos en el servicio y confusión con el personal. A pesar de esto, la calidad de la comida fue notable, y la tranquilidad del entorno lo convierte en un lugar perfecto para escapar.

La habitación Dalí fue un sueño! Comodísima y con vistas espectaculares. La piscina con esas vistas es un plus, pero algunas cosas como el servicio en el restaurante son un poco lentas.

1) Vistas impresionantes
2) Piscina agradable
3) Habitaciones modernas

1) Servicio lento
2) Acceso complicado
3) Limpieza mejorable

Las vistas desde el hotel son extraordinarias.

Tuvimos varios problemas durante nuestra estancia. La limpieza de la habitación era muy mejorable, encontramos algunas áreas descuidadas que afectaron nuestra experiencia. Además, el servicio en el restaurante fue decepcionante, lento y poco atento. noté que el acceso a algunas instalaciones era complicado y esto se sumó a nuestra frustración.

Las habitaciones son amplias y cómodas. Disfrutamos de la hermosa piscina y de la tranquilidad del entorno. Además, la cena en el restaurante Drac fue de diez, todo delicioso. Vine con mi hermano y nuestra familia, y fue genial estar en un lugar tan acogedor.

Mi mujer dice que faltaron toallas en la piscina. Para los padres de familia estaría bien contar con más atención en los detalles del servicio, ya que la experiencia podría mejorar mucho.

La tranquilidad del hotel y la hermosa piscina con azulejos verdes realmente nos encantaron. Las vistas son impresionantes y el desayuno fue un gran comienzo del día. Además, el hotel es simplemente precioso, como sacado de una revista. valoramos que tienen cargadores gratuitos para coches eléctricos.

Falta algo de atención a los detalles en la limpieza.

disfrutamos de habitaciones amplias con terrazas hermosas y la cena en el restaurante drac fue excepcional. las instalaciones del hotel eran preciosas, perfectas para relajarse.

solo hubo una toalla por persona.

La estancia fue maravillosa, especialmente por las instalaciones diseñadas para niños. La piscina, con vistas impresionantes, siempre estaba limpia y el personal era muy amable, lo que nos hizo sentir muy cómodos. Las habitaciones eran espaciosas y bien decoradas, además de contar con una terraza encantadora donde los niños podían jugar mientras disfrutábamos de un café. La comida también fue un punto destacado. el desayuno era variado y de gran calidad, lo que siempre ayuda a empezar el día de la mejor manera.

Sin embargo, notamos que el servicio en algunos momentos podía ser un poco lento, lo cual afectó la experiencia global.

Tuve una experiencia maravillosa en el Castell D'Empordà. Las habitaciones eran amplias y llenas de encanto, con una piscina excepcional que me permitió relajarme tras un día de exploración. Sin embargo, el servicio en algunas ocasiones se sintió un poco lento, lo que podría mejorar.

una boda de ensueño en un castillo con vistas asombrosas y descanso en piscina

Recientemente tuvimos nuestra boda en el Castell D'Emporda y fue simplemente mágico. Nuestro coordinador de bodas, Sandra, fue increíblemente útil y siempre estaba ahí para apoyarnos en cada paso del camino. Las vistas desde el castillo son verdaderamente impresionantes, y la piscina fue el lugar perfecto para relajarnos. La cena que sirvieron fue inolvidable y a nuestros invitados les encantó. Es un lugar perfecto para una boda de ensueño o unas vacaciones especiales. ¡No podemos esperar para regresar!

La vista desde la habitación es impresionante. La comida en el restaurante Drac fue decepcionante y el servicio lento. Recomendado para andar en bicicleta, hay rutas cercanas.

me encantaría volver

La habitación Dalí fue increíble, cómoda y con vistas espectaculares. Las instalaciones eran preciosas, especialmente la piscina exterior con esas vistas impresionantes. Disfruté del spa, que tenía masajes y tratamientos faciales. El restaurante Drac, sin duda, un lugar para tener una cena deliciosa. Todo muy recomendable.

Todo increíble! Vistas panorámicas impresionantes, habitaciones amplias y bien decoradas, atención al detalle excepcional.